L’Àtic presenta un menú degustación que celebra el otoño y la esencia interior de Mallorca

Con la llegada de los primeros fríos y el cambio de luz sobre la bahía de Palma, el restaurante L’Àtic, dirigido por el chef Juan Pinel (reconocido como Chef Revelación 2025 en los Premis Gastronòmics de Mallorca), presenta las novedades de su menú degustación, Evolución. Una propuesta culinaria que profundiza en el paisaje otoñal de la isla e incide en su línea de cocina de fondo, producto estacional y guiños contemporáneos, y que esta temporada pone el acento en los sabores del interior de Mallorca, sin renunciar a todas esas influencias procedentes de las cocinas del sudeste asiático que tanto enriquecen la identidad de este joven chef.

La propuesta comienza con tres snacks en los que Pinel revisita varias elaboraciones populares mallorquinas desde la sutileza técnica que caracteriza su cocina: Vaca, alcaparra y oliva (una reinterpretación de la clásica lengua con alcaparras, guisada a baja temperatura, especiada y curada en sal muera, se presenta cortada en láminas de fiambre en brocheta y se termina en la robata, con salsa de alcaparras y polvo de oliva), Llampuga, limón y pimientos (tartaleta fina de tartar de llampuga curada en salmuera, con dados de limón y deles de pimiento rojo y verde) y Puerro, yema y sobrasada (puerro confitado a la brasa con salsa de yema de huevo y sobrasada).

Tradición, técnica y memoria

Los pases principales muestran, sin duda, la vertiente más técnica del chef. No puede faltar su ya clásico plato de salmonete, en el que el pescado se aprovecha al completo. El lomo, a la brasa; cabeza y espina se usan para un fondo convertido en sopa de curry amarillo servida con pasta artesanal de Porreres, y para acompañar, un paté elaborado con los interiores.

A continuación, castañuela de cerdo al vino tinto con piñones y patata rota y chafada con aceite de oliva. Por último, Patata, hongo y naranja, un magret de pato marinado en soja y naranja, marcado a la brasa y servido con seta de temporada y cremoso de apio.

El menú concluye con dos postres que evocan el recetario familiar y el sabor profundo del otoño: Higo, lácteo y flor (inspirado en un recuerdo de infancia: bebida fermentada de higo con burbujas de leche y una flor frita con crema de queso e higos) y el clásico chocolate en texturas con helado de café.

Una experiencia en las alturas

Situado en la séptima planta del hotel Saratoga, uno de los hoteles más emblemáticos de Palma, ubicado en pleno centro de la ciudad, L’Àtic ofrece dos espacios diferenciados: una barra de cocina con capacidad para seis comensales (desde la que se puede disfrutar del trabajo en directo del equipo de Pinel y de las vistas a la Catedral) y una sala luminosa con ventanales hacia el puerto de Palma.

Además, con la reciente reapertura del Blue Jazz Club, el restaurante mantiene vivo su espíritu musical característico. Todos los jueves, los comensales podrán disfrutar de conciertos de jazz únicos. Sin olvidar las sesiones de piano en directo las noches de los viernes y los sábados.